La recaudación municipal refleja la caída de la actividad económica. El IBI es el balón de oxígeno de las arcas municipales.
Baja la recaudación del IAE (7,7%), aparatos de distribución (10%) y el impuesto de vados (80.000 €). Por su parte, el IBI aumenta su recaudación en 100.000 €. La congelación de los impuestos locales para el 2012 aprobada por el pleno del Ayuntamiento, puede frenar tan solo la caída de la actividad económica en un año que según las previsiones, no verá un crecimiento económico capaz de generar empleo.
Roberto Coira explicó en el pleno la caída de ingresos y que el Ayuntamiento tendrá que hacer frente el próximo año a facturas pendientes que estaban "en los cajones". "Se mantienen los tipos vigentes en el año actual", anunció, como estaba anunciado, el edil.
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